Air Canada canceló alrededor de 360 vuelos en el aeropuerto Toronto Pearson en los primeros siete días de junio, casi el 10 por ciento de sus viajes, en medio de la escasez de personal y un aumento de pasajeros en el aeropuerto más activo de Canadá. Las cancelaciones de vuelos se dividen por igual entre la llegada y la salida.
Un repunte en la demanda de viajes aéreos ha abrumado a las agencias gubernamentales que realizan controles de seguridad, aduanas e inmigración a los pasajeros en Pearson y otros aeropuertos importantes de Canadá. Peter Fitzpatrick, portavoz de Air Canada, dijo que la tasa general de vuelos de la aerolínea sigue siendo alta, pero los problemas de personal en las agencias gubernamentales han afectado las operaciones. "En algunos casos, los tiempos más largos de procesamiento de aduanas y seguridad en los aeropuertos y las limitaciones recurrentes del control del tráfico aéreo impuestas a los movimientos de aeronaves, en particular en Pearson, han obligado a las aerolíneas a cancelar vuelos", dijo Fitzpatrick. Los pasajeros se quejan de ser retenidos en aviones estacionados antes de que se les permita desembarcar para el despacho de aduanas, y de largas esperas para que les revisen el equipaje y los bolsillos antes de abordar. A medida que se acerca la temporada de viajes de verano, Monette Pasher, directora del Consejo de Aeropuertos de Canadá, dijo que el gobierno debería aliviar los cuellos de botella eliminando los controles de salud y las normas establecidas para contener la pandemia de COVID-19. Estos incluyen requisitos de vacunas para pasajeros y empleados, y pruebas aleatorias para pasajeros, todo lo cual lleva tiempo procesar y administrar.