Los habitantes de Ontario ya no estarán obligados legalmente a trabajar desde casa y las empresas ya no estarán obligadas a mantener un registro de clientes con fines de rastreo de contactos cuando las nuevas medidas de salud pública entren en vigencia el lunes.
El Dr. Kieran Moore, director médico de salud de Ontario, confirmó esos cambios y otros más cuando describió el enfoque de reapertura gradual de la provincia el jueves.
Los límites de reuniones sociales en interiores aumentarán de cinco a 10, mientras que las reuniones al aire libre se limitarán a 25 personas y los restaurantes podrán reabrir sus comedores al 50 por ciento de su capacidad.
Se permitirá el servicio de alimentos y bebidas en eventos deportivos bajo techo, salas de conciertos, teatros y cines, junto con otros lugares similares; pero se requerirá que las personas permanezcan sentadas cuando consuman alimentos o bebidas en estos lugares. También se seguirán requiriendo mascarillas cuando las personas no estén comiendo ni bebiendo.
La medida es una buena noticia para los funcionarios de Cineplex, quienes se enfrentaron a no poder servir palomitas de maíz a los asistentes al teatro.
“Trabajamos en estrecha colaboración con la provincia y les brindamos los datos que muestran la abrumadora seguridad de los cines y la comida en los teatros. Estamos muy contentos con esta noticia”, dijo un portavoz de Cineplex. “Las películas y las palomitas de maíz van de la mano. Estamos muy contentos de que nuestros invitados en Ontario puedan disfrutar de la experiencia completa de la pantalla grande cuando nuestros cines vuelvan a abrir el lunes”.
Ya no se requerirá que las empresas recopilen información de los clientes para el rastreo de contactos, lo que les permitirá concentrar sus esfuerzos en hacer cumplir otras medidas de salud pública, como el uso de mascarillas, según Moore, quien dijo que tendremos que aprender a vivir con el virus.
“Tenemos que entender con Ómicron que no podemos eliminar esta amenaza, de hecho, tenemos que aprender a vivir con ella”, dijo Moore. “Las formas en que hemos reducido las amenazas han funcionado bien durante los últimos dos años; mediante el uso de mascarillas, el distanciamiento e higiene de manos y quedarse en casa si está enfermo”.
Además, la provincia está eliminando el requisito legal de trabajar desde casa, excepto cuando sea necesario. Moore agregó que aquellos que pueden trabajar desde casa pueden continuar haciéndolo para limitar la movilidad y reducir la cantidad de contactos diarios.
El gobierno también esta reanudando de manera gradual algunos servicios de salud, como los exámenes para la detección del cáncer; pero todavía hay una pausa en las cirugías electivas.
FOTOGRAFÍA: CHRIS YOUNG
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ