Es probable que los próximos datos de inflación de Statistics Canada para junio no muestren ningún alivio para los canadienses.
Las cifras del índice de precios al consumidor publicadas el mes pasado mostraron que la inflación anual canadiense alcanzó un máximo en casi 40 años, al situarse en 7,7 por ciento en mayo. Los expertos financieros y los economistas en general esperan que las últimas cifras, cuando se publiquen el miércoles, sean aún más altas, impulsadas en gran parte debido a los precios récord de la gasolina para el mes. David Macdonald, un economista sénior del Centro Canadiense de Políticas Alternativas, fija la tasa de inflación para junio entre el ocho y el nueve por ciento. El Informe de política monetaria del Banco de Canadá de julio, publicado la semana pasada, predice que la inflación rondará el ocho por ciento para los trimestres intermedios de 2022, antes de disminuir a alrededor del tres por ciento para fines de 2023. Macdonald cree que los próximos meses serán clave para determinar si Canadá entrará en recesión. Si la inflación en junio, julio y agosto supera las predicciones del banco central y supera el nueve por ciento, "eso realmente sentaría las bases para nuevos aumentos de tasas en el otoño", dijo. "Y luego creo que es más probable que estemos en el camino hacia una recesión". La semana pasada, en un esfuerzo por apagar el fuego de la inflación, el Banco de Canadá elevó su tasa de interés clave en un punto porcentual completo. El anuncio marcó la cuarta subida de tipos de interés del banco desde marzo, y la mayor desde 1998.