Los canadienses parecen mucho más propensos a comprar vehículos eléctricos o híbridos; pero no necesariamente por el impacto ambiental.
Con los precios de la gasolina aumentando a nivel mundial e impactando las vidas de los canadienses, una nueva encuesta cortesía de Maru Public Opinion encuentró que el 48 por ciento de los encuestados está considerando un vehículo totalmente eléctrico o híbrido para su próxima compra.
Los resultados se basan en una encuesta realizada a 1.555 personas.
La encuesta también reveló que la mayoría (56 por ciento) cree que los precios más altos de la gasolina llegaron para quedarse, e incluso podrían subir más.
“Los canadienses creen que las dos razones principales detrás de los recientes aumentos en los precios en las bombas de gasolina son una oferta mundial más estricta debido a los eventos internacionales (27 por ciento) y las compañías de petróleo/gas que simplemente aumentan los costos de las bombas para obtener una mayor toma de ganancias (24%)”. dijo John Wright, vicepresidente ejecutivo de Maru Public Opinion.
Los precios actualmente se ubican en 184,9 centavos por litro en la mayoría de las estaciones de GTA. El costo de la gasolina ya superó los $ 2 por litro en British Columbia.
El lunes, el primer ministro de Alberta, Jason Kenney, anunció que su gobierno suspendería la recaudación del impuesto al combustible de su provincia, por un valor de 13 centavos por litro y en aumento. No está claro si el premier de Ontario, Doug Ford hará lo mismo.
El principal analista de petróleo de En-Pro International Inc, Roger McKnight, ha dicho que los precios de la gasolina en el sur de Ontario podrían alcanzar los 2,20 dólares por litro el próximo mes.
Demográficamente, la encuesta determinó que los autos eléctricos e híbridos son más atractivos para los conductores adultos canadienses más jóvenes (de 18 a 34 años, 31 por ciento), seguidos por los de mediana edad (35 a 54, 12 por ciento) y las personas de 55 a 55 años o más.
La invasión rusa de Ucrania ha llevado los precios del petróleo a niveles no vistos en al menos ocho años; ya que las compañías cisterna evitan el crudo ruso y las sanciones excluyen a algunos bancos de un sistema de pagos global, lo que afecta gravemente sus exportaciones.
ARTÍCULO POR: LUCAS CASALETTO
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ