Negocios toman partido en la aplicación de la ley
- Eliana González
- Jul 8, 2020
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A medida que los municipios de Ontario promulgan nuevas medidas con respecto al uso de mascarillas en ubicaciones comerciales, los propietarios de negocios son independientes cuando se trata de lidiar con clientes que se niegan a cumplir.

El martes, Toronto y Ottawa se unieron a Kingston para establecer reglas que requieren una mascarilla en el interior de edificios de negocios que están abiertos al público. Las reglas entran en vigencia en medio de un puñado de videos de redes sociales que muestran a personas del área de Toronto tratando de ingresar a tiendas u hospitales sin máscaras. En algunos videos, los clientes amenazan con quejas legales.
La política de muestra de Toronto, para ser utilizada por las empresas locales, debe capacitar a los empleados estatales sobre qué hacer si los clientes se vuelven "agresivos" o solicitan más información sobre el propósito y funcionamiento de las mascarillas.
Según un experto en derecho laboral, si un cliente se niega a usar una máscara, la empresa no puede solicitar una prueba de exención, ya que de hacerlo podría desencadenar una queja de derechos humanos si la persona sufre una discapacidad.
El premier de Ontario, Doug Ford, dijo anteriormente que la provincia carece de la capacidad para hacer cumplir los estatutos de mascarillas, mientras que un portavoz de la ciudad de Toronto dijo que educar a las empresas y gerentes sigue siendo un "objetivo clave" de la aplicación.
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