La junta de servicios policiales de Ottawa aprobó el nombramiento de hasta 831 oficiales de la RCMP para ayudar a la policía municipal, que promete una fuerte presencia en la capital y tolerancia cero con el odio este fin de semana.
La policía de Ottawa solicitó a la junta que apruebe el nombramiento acelerado de “hasta 200” oficiales adicionales mientras se preparan para un segundo convoy, esta vez con cientos de motocicletas en lugar de camiones.
Hasta 631 miembros de la RCMP que fueron designados para ayudar a poner fin al bloqueo del centro en febrero también podrían ser reelegidos según sea necesario.
El Servicio de Policía de Ottawa dijo que está pidiendo que esos nombramientos expiren el 4 de julio “en previsión de eventos y manifestaciones adicionales”. Usualmente suelen durar cinco años.
El jefe de policía interino Steve Bell dijo a los concejales de la ciudad de Ottawa que su fuerza no tiene intención de permitir que el “Rolling Thunder Convoy” se convierta en otra ocupación ilegal y que los oficiales actuarán rápidamente cuando vean alguna irregularidad.
“Los comportamientos amenazantes o intimidatorios se abordarán con todas las medidas de cumplimiento apropiadas”, dijo Bell. “Los equipos de investigación, incluida nuestra unidad de delitos de odio, están enfocados en recopilar pruebas y presentar cargos cuando corresponda. La exhibición de símbolos de odio como esvásticas terminará en cargos”.
El jefe de policía también trató de tranquilizar a los residentes aún conmocionados por el “Convoy de la Libertad”, en el que cientos de manifestantes ocuparon el centro de la ciudad durante tres semanas para protestar por las restricciones de COVID-19 y exigir la renuncia del gobierno liberal.
La ocupación interrumpió el tráfico, obligó a cerrar negocios y provocó denuncias de intimidación, acoso y conducta odiosa. El incesante sonido de bocinas de aire de grandes camiones molestó a los residentes durante días.
El jefe de policía Peter Sloly renunció después de que muchos residentes criticaron a la policía por no tomar una línea más dura con los manifestantes.
En nombre de los residentes y negocios de Ottawa, hay una demanda busca más de $300 millones en daños por parte de camioneros y donantes.
Varios organizadores clave de las protestas en Ottawa, incluidos Pat King y Tamara Lich , fueron arrestados y acusados.
La manifestación, que también interrumpió varios cruces fronterizos con Estados Unidos, terminó después de que el gobierno liberal federal invocara la Ley de Emergencias y la policía interviniera para detener y arrestar a decenas de personas.
En un mensaje dirigido a los residentes de Ottawa, Bell dijo que la policía no “permitirá condiciones inseguras o ilegales que puedan conducir a otra protesta”.
“Hemos escuchado sus preocupaciones”, dijo. “Sabemos que todavía se está recuperando de la interrupción y la criminalidad”.
El grupo Rolling Thunder no ha sido claro sobre la causa por la que se unen, excepto para decir que estarán en Ottawa para celebrar pacíficamente su libertad.
El sitio web de “Rolling Thunder Ottawa” dijo que está asociado con los grupos Veterans for Freedom y Freedom Fighters Canada, los cuales parecen tener vínculos con el "Convoy de la libertad".
Veterans for Freedom se describe a sí mismo en su sitio web como un grupo formado por veteranos canadienses que trabajan para "restaurar las libertades fundamentales para todos los canadienses" y "defender las leyes canadienses".
Todos los miembros del comité directivo de ese grupo tienen vínculos con las protestas anteriores, incluido uno que estaba entre los portavoces del convoy. Otros aparecieron en videos de YouTube apoyando a los manifestantes del convoy.
El sitio web de Freedom Fighters Canada dice que es una organización “que exige el fin de todos los mandatos gubernamentales” y el fin de la “legislación tiránica”. Algunos de sus organizadores también asistieron o apoyaron públicamente las protestas anteriores.
Bell dijo a los concejales que la policía está en contacto con los organizadores de Rolling Thunder, que esperan congregar a más de 500 motocicletas de la ciudad. La fuerza también está trabajando con la RCMP y las agencias de inteligencia para identificar posibles amenazas.
“Los residentes verán una gran presencia policial, incluidos los oficiales encargados de hacer cumplir los estatutos y el estacionamiento”, agregó. “Habrá un aumento significativo de oficiales de la Policía Provincial de Ontario, de la Royal Canadian Mounted Police y otras jurisdicciones policiales municipales”.
Los organizadores del convoy han dicho que planean dar una vuelta por la ciudad, con una parada en el National War Memorial, así como una marcha y un mitin en Parliament Hill donde se pronunciarán discursos.
La policía no permitirá que los manifestantes lleven sus bicicletas a las calles alrededor de Parliament Hill, creando un posible conflicto; pero Bell dijo a los concejales que actualmente no hay ningún plan para erigir una valla alrededor del National War Memorial.
Los manifestantes del "Convoy de la libertad" fueron fuertemente criticados por pararse en la Tumba del Soldado Desconocido y estacionar sus camiones en el sitio conmemorativo durante la primera semana de la ocupación. Se instalaron cercas; pero luego los manifestantes las derribaron.
“No ha habido ninguna solicitud para cercar esa área”, dijo Bell. “Tendremos oficiales disponibles a pie en y alrededor del área, como lo indiqué antes, listos para responder a cualquier tipo de incidente que pueda ocurrir”.
En respuesta a la presentación de Bell, varios concejales que representan áreas alrededor del centro de la ciudad expresaron su preocupación por los informes que los participantes del convoy planean establecer o recorrer en diferentes vecindarios y sobre qué planea hacer la policía al respecto.
También hubo preocupaciones de que la manifestación interfiriera con una importante recaudación de fondos en bicicleta para Children's Hospital of Eastern Ontario, que está programada para el sábado.
Bell indicó que la policía vigilaría de cerca el convoy Rolling Thunder durante su recorrido por la ciudad, respaldado por grúas y barreras físicas. La policía también planea tener “equipos de respuesta rápida” listos para responder a emergencias, dijo.
La concejal del centro de Ottawa, Catherine McKenney, le dijo a Bell que los residentes están nerviosos y que también están hartos.
"Los residentes no aceptarán ninguna incursión en sus vecindarios por parte de grupos de personas supremacistas blancas, racistas o extremistas”.
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ