El premier de Ontario, Doug Ford, anunció planes para reabrir gradualmente la provincia el lunes después de su estado de emergencia.
La provincia regresará a un enfoque escalonado al mantener el cierre en la mayoría de las regiones de salud pública y también se extenderá la orden de quedarse en casa. El estado de emergencia declarado el mes pasado podrá expirar según lo programado el martes.
Algunos aplaudieron el enfoque de la provincia para una flexibilización gradual de las medidas de COVID-19, aunque a muchos les preocupa que pueda conducir a otra ola de casos en aumento.
El Dr. Andrew Morris, profesor de medicina en la Universidad de Toronto, dijo que estaba alentado por el enfoque del gobierno provincial; pero cree que el regreso al marco codificado por colores sin controles de movimiento conducirá a más viajes entre regiones.
“Obtienes lo que llamamos contaminación cruzada”, dijo Morris. “Las personas de áreas de alta transmisión de la enfermedad van a áreas donde hay poca transmisión y tú le cuentas tus problemas a otra persona”.
El gobierno introdujo un "freno de emergencia" que permitirá al principal médico de la provincia, el Dr. David Williams, trasladar de inmediato una región al bloqueo si los casos aumentan.
Morris dijo que también es escéptico acerca de cómo la provincia aplicará el llamado "freno de emergencia", y dijo que para cuando se aplique a las regiones ya será demasiado tarde.
“Tienes una respuesta lineal, una respuesta incremental, a un problema exponencial. Y se sale de control ”, dijo.
Con Kingston entre las regiones de salud pública programadas para mudarse a la "Zona Verde" de Ontario el miércoles, Max Kaiser, el teniente de alcalde de Greater Napanee, dice que están incómodos con la idea de que las personas viajen al área para hacer compras y suplir otras necesidades.
"Absolutamente, hay mucha preocupación", dijo Kaiser. "Antes de Navidad, como el GTA estaba cerrado a principios de diciembre, pero no estábamos en esta área, vimos muchos vehículos con placas de Pickering, Oshawa, Whitby en la zona durante sus compras navideñas".
La directora ejecutiva de la Asociación de Enfermeras Registradas de Ontario, Doris Grinspun, dijo que la provincia debería haber retrasado la reapertura económica hasta dos o tres semanas después de que todos los estudiantes reanuden el aprendizaje en persona para determinar si se ha logrado de manera segura.
Los estudiantes de Toronto, la región de Peel y la región de York regresarán a las aulas físicas la próxima semana, mientras que las escuelas en otras regiones han reabierto.
Si bien los nuevos casos de COVID-19 en la provincia han disminuido gradualmente en las últimas semanas, los funcionarios de salud están cada vez más preocupados por el aumento de más cepas infecciosas. En Ontario han aparecido tres cepas del virus.
Grinspun dijo que con la creciente propagación de cepas variantes, se necesita precaución.
“Ahora no es el momento de suavizarlo”, dijo. "Ahora es el momento de mantenerse".
Haciéndose eco de esos sentimientos, la principal doctora de Toronto, Eileen de Villa, dice que la incertidumbre con las mutaciones, junto con la capacidad de que se propaguen incluso más rápido que la cepa original, significa que ahora no es el momento de aliviar las restricciones y las medidas de salud.
“Hoy estamos en una transición de una pandemia a otra. La transición a una nueva pandemia ”, dijo de Villa.
ARTÍCULO POR: MICHAEL RANGER, LUCAS CASALETTO
FOTOGRAFÍA: LARS HAGBERG
EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ