Ontario aclaró las reglas para visitantes al ir a hogares de cuidado a largo plazo, diciendo que las pautas actualizadas igualarán el campo de juego para que las familias y los cuidadores en toda la provincia tengan un mayor acceso a los residentes.
Las nuevas pautas, que entrarán en vigencia el 9 de septiembre, están destinadas a mejorar las reglas actuales que el Ministerio de Atención a Largo Plazo señala que se han aplicado de manera inconsistente; ya que su aplicación se dejó a la discreción de las instalaciones individuales.
“Este anuncio garantizará que las pautas sobre las visitas (de los cuidadores) se apliquen de manera constante en todos los hogares para que todos los residentes obtengan el apoyo que merecen”, dijo la ministra de cuidados a largo plazo, Merrilee Fullerton, en una declaración escrita.
Bajo las nuevas reglas, los cuidadores esenciales podrán visitar los hogares, incluso durante los brotes de COVID-19, sujeto a las instrucciones de la unidad de salud local.
La política actualizada significará que un residente puede designar dos cuidadores que pueden visitar sin límites de tiempo.
Si un hogar no sufre un brote o el residente no presenta síntomas ni se aísla por sí mismo, los cuidadores pueden visitar juntos.
Desde marzo, a los visitantes esenciales, como los miembros de la familia, se les ha permitido técnicamente visitar los hogares para ayudar a brindar atención a un residente de cuidados a largo plazo, pero el gobierno señala que no todos tuvieron esa oportunidad porque las visitas se dejaron a discreción de cada hogar.
La inconsistencia ha provocado durante meses la ira de familias y defensores, provocando al menos una denuncia de derechos humanos.
Argumentaron que los miembros de la familia son una parte clave del equipo de cuidado de un residente de cuidados a largo plazo, y ayudan con todo, desde la alimentación hasta el baño.
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