Los funcionarios federales advierten que Canadá podría estar al borde de una cuarta ola de COVID-19, impulsada por la variante Delta altamente contagiosa, si el país abre demasiado rápido antes de que se hayan vacunado suficientes personas.
La directora de salud pública de Canadá dijo que los pronósticos a largo plazo indican que un acercamiento apresurado a la reapertura podría presagiar un brusco resurgimiento del virus para fines del verano.
La Dra. Theresa Tam dijo que las nuevas proyecciones subrayan la necesidad de actuar con cautela al levantar las medidas de salud pública a medida que surgen los primeros signos de crecimiento epidémico en algunas áreas.
Tam dijo que los funcionarios esperan que la variante Delta pueda alimentar la propagación del virus entre las personas más jóvenes no vacunadas, lo que provocará un aumento importante del recuento de casos y las tasas de hospitalización este otoño e invierno.
Ella agregó que la aceptación de la vacuna entre los adultos jóvenes de 18 a 39 debería aumentar al 80 por ciento, en comparación con el 72 por ciento actual, para amortiguar las consecuencias de una posible cuarta ola.
La Dra. Tam mencionó que los recuentos actuales de casos de COVID-19 se han desplomado en un 93 por ciento desde el pico de la tercera ola, para un promedio de 640 nuevas infecciones reportadas diariamente durante los últimos siete días.
ARTÍCULO POR:ADINA BRESGE
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EDICIÓN Y TRADUCCIÓN POR: ELIANA GONZÁLEZ