No habrá acuerdo entre el gobierno de Ontario y el sindicato que representa a 55.000 trabajadores de apoyo a la educación, lo que significa que la huelga del viernes es definitiva.
En un comunicado publicado en las redes sociales el jueves por la tarde, el comité de negociación dijo que la mediación ha concluido.
“Esta tarde se nos informó que la mediación ha concluido”, dijo el comité de negociación.
"Está claro que este gobierno nunca tuvo la intención de negociar. El tiempo y el esfuerzo que han invertido en el proyecto de ley 28, que elimina los derechos de la Carta de los trabajadores de la educación, deberían haberse invertido en un acuerdo que hubiera respetado a los trabajadores y asegurado los servicios que los estudiantes necesidad desesperada están asegurados.”
De acuerdo a sus líderes CUPE irá a la huelga mañana, si lo hacen después de que esta legislación haya sido aprobada la huelga será ilegal y usaremos cada herramienta que tengamos para acabar con esta interrupción. He instruido a las juntas escolares para que hagan todo lo posible por mantener la mayor cantidad de escuelas abiertas por el mayor tiempo posible y también e instruido que los maestros y el staff que acudan a su trabajo mañana para dar clases presenciales, pues a pesar de la huelga de cupe haremos todo lo posible por reducir esta disrupción inaceptable.
La legislación que la provincia planea aprobar incluye un contrato de cuatro años y prohibiría las huelgas, con fuertes multas si los trabajadores no cumplen. La ley propuesta establece que los miembros de CUPE podrían enfrentar multas de hasta $4,000 por día y el sindicato podría enfrentar multas de hasta $500,000 por día.
El propio premier Ford defendió el proyecto de ley esta mañana durante la sesión en la que tuvo varios intercambios con miembros de la oposición. Escuchemos una parte del debate con el líder del NDP Peter Tabuns:
Necesitamos a los niños dentro de las aulas aprendiendo. Esto es por el bienestar físico y mental de 2 millones de estudiantes y sus respectivas familias después de dos años muy difíciles de pandemia. Desafortunadamente CUPE rechazó levantar la huelga y echar atrás el cierre de las escuelas y no nos ha dejado otra opción que pasar la legislación para asegurar la estabilidad.
De hecho el Premier si tiene opción, podía haberles hecho una buena oferta, podría hacer una diferencia en la vida de nuestros niños y los trabajadores de la educación. El premier dice que está bien que los trabajadores de la educación tengan que usar los bancos de alimentos, está actuando como un mal jefe, cuando un mal jefe irrespeta y paga mal los empleados se van, renuncian y entonces no será solo mañana o la semana que viene que los padres se tendrán que preocupar, si los trabajadores abandonan la profesión es el futuro de la educación lo que está en juego.
La Asociación Canadiense de Libertades Civiles exige que la provincia retire el proyecto de ley y condena el uso de la cláusula de excepción por parte del gobierno de Ford.
“Esta catástrofe podría filtrarse fuera de Ontario y en todo Canadá”, dijo Noa Mendelsohn Aviv, directora ejecutiva de la organización. “El gobierno está violando el derecho constitucional de los trabajadores a la libertad de asociación”.
La provincia tiene la intención de utilizar la cláusula para proteger la legislación propuesta de los desafíos legales. La cláusula permite que la legislatura anule partes de la Carta Canadiense de Derechos y Libertades por un período de cinco años.
El gobierno de Ford ha estado impulsando la legislación de regreso al trabajo desde el lunes después de que el sindicato dio un aviso de cinco días de una huelga en toda la provincia si no se llegaba a un acuerdo antes del viernes.