Toronto ha dado luz verde al consumo de alcohol en los parques públicos, ampliando el exitoso proyecto piloto del verano pasado. Con el apoyo de 20 concejales, la propuesta marca un cambio significativo en el paisaje recreativo de la ciudad.
La prueba original abarcó 27 parques, incluidos Trinity Bellwoods, Christie Pits y Riverdale Parks. Animada por su éxito, la ciudad planea ahora ampliar el privilegio al menos a un parque por distrito, con 144 ubicaciones adecuadas en toda la ciudad.
La opinión pública ha desempeñado un papel fundamental ya que una encuesta reciente indicó que el 46% de los encuestados aprueban el alcohol en estos lugares. Los habitantes de East York y Toronto, donde se encuentran la mayoría de los parques piloto, se mostraron especialmente receptivos a la idea. A pesar de la resistencia de algunos concejales, sobre todo de la zona oeste, la decisión de excluir del programa a determinados barrios fue rechazada.
Los funcionarios municipales han informado que los disturbios durante el periodo de prueba han sido mínimos, y sólo se han recibido dos quejas relacionadas con el alcohol. De igual manera, las intervenciones policiales se mantuvieron prácticamente sin cambios y las visitas a urgencias relacionadas al alcohol tampoco experimentaron ningún aumento en comparación con años anteriores.
Según la nueva normativa, se permite beber entre las 5:30am y la medianoche, con un límite del 15% de contenido de alcohol, manteniendo una distancia respetuosa de las zonas designadas, como áreas infantiles, como son los playground o zonas de juegos de agua para niños.