La primera semana de enero no suele ser temporada de incendios forestales. Pero cuando comenzó 2024, más de 100 "incendios zombis" ardían activamente en Columbia Británica: vestigios del verano pasado que normalmente permanecen inactivos durante el invierno.
"Eso es alucinante para mí. Simplemente inaudito", dijo Lori Daniels, profesora del departamento de ciencias forestales y de conservación de la Universidad de Columbia Británica.
El clima cálido y seco que culminó lo que se espera sea declarado el año más caluroso jamás registrado en el planeta (y la temporada de incendios forestales más destructiva de Canadá, con diferencia, con más de 6.500 incendios que quemaron cerca de 19 millones de hectáreas) no ha terminado.
Dado que el sistema climático global de El Niño continuará durante esta primavera, los pronósticos sugieren que 2024 podría ser aún más caluroso, lo que llevó a los expertos en incendios forestales y políticas públicas a solicitar más esfuerzos de prevención de incendios forestales ahora.