El premier de Ontario, Doug Ford, suavizó hoy el tono después de haber amenazado con medidas de retaliación contra Estados Unidos, si Trump seguía adelante con la imposición de aranceles a las importaciones canadienses, como por ejemplo cortar el suministro de la energía que Ontario le vende a estados como Nueva York y Michigan.
El premier incluso aseguró que tras sus comentarios conversó con los gobernadores de estos dos estados a los que Ontario les vende energía.
Es que ayer el presidente electo Trump, cuando le preguntaron por la amenaza de Ford de cortarles la energía, respondió con un escueto “está bien, si él hace eso, está bien”.
Ayer tanto la premier de Alberta, Danielle Smith, como el premier de Quebec, Francois Legault, se mostraron en desacuerdo con dejar de venderle energía o petróleo a Estados Unidos o con amenzar a Trump con cortarle la luz.
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