El gobierno del primer ministro de Ontario, Doug Ford, se está preparando para aumentar significativamente la cantidad de cirugías realizadas en clínicas privadas con fines de lucro.
Ford y la ministra de Salud, Sylvia Jones, planean hacer un anuncio la próxima semana sobre la expansión de la cantidad y el rango de cirugías realizadas en centros de salud independientes fuera de los hospitales, dijo un alto funcionario del gobierno, que pidió no ser identificado porque estaban presentando los planes del gobierno. .
Para los pacientes de Ontario, el funcionario dice que la medida dará lugar a que se realicen miles de cirugías y procedimientos de diagnóstico cada año, una forma inmediata de reducir los tiempos de espera para operaciones sencillas.
Ante los cuestionamientos de que la contratación de clínicas privadas por parte de la provincia podría conducir a una privatización de la salud, el Premier Ford ha defendido su uso:
No me gusta el término “privado”, porque no lo es, les aseguro que nadie en Ontario tendrá que pagar por esos servicios con su tarjeta de crédito, lo harán con la tarjeta OHIP. pero si podemos quitarle carga y las largas listas de espera a los hospitales y tener centros de salud independientes, con los mismos estándares e incluso los mismos doctores, que puedan ir a esos lugares en su tiempo libre. A la gente no le importa el lugar mientras tenga las mismas regulaciones, los mismos doctores de primera categoría que trabajan en los hospitales y que pueden tener algunas horas libres para ir a otra facilidad y operar. Cirugías simples, no las más complicadas, como remplazos de cadera, de rodilla, cataratas, estos son procedimientos sencillos pero que sobrecargan nuestro sistema de salud.
Los establecimientos de salud independientes son clínicas operadas por el sector privado que reciben fondos públicos del Plan de Seguro Médico de Ontario (OHIP) para realizar procedimientos médicamente necesarios.
Pero a varios profesionales de la salud les preocupa que la medida agote los recursos de los hospitales financiados con fondos públicos y beneficie a los propietarios de las clínicas del sector privado sin mejorar la atención al paciente. También preocupa que con la medida se vea reducida la capacidad de los hospitales para retener a su personal y que no se vayan al sector privado.