Desde temprano en la mañana empezaron a llegar las multitudes a los alrededores del Rogers Centre donde hoy se inicia la serie de conciertos de Taylor Swift en la ciudad de Toronto.
Más de 50 mil personas asistirán cada noche a los seis conciertos a realizarse esta semana y la próxima, pero también miles de fanáticos de Taylor Swift se han trasladado a los alrededores del estadio, aún sin tener boletas, con la esperanza de conseguir alguna a último minuto.
Mientras tanto, varias calles estarán restringidas al tráfico local en las tardes y noches de conciertos para acomodar a las multitudes que entran y salen del Rogers Centre, y otras estarán cerradas por completo en la zona donde terminan los espectáculos.
Se han agregado docenas de autobuses y tranvías a las rutas de tránsito alrededor del estadio, y Metrolinx, la agencia del sistema GO Transit de Ontario, también ha agregado viajes adicionales y horarios extendidos en algunas regiones para acomodar a los fanáticos que buscan viajar a casa.
"Nos estamos preparando para algo que sería similar a la llegada de los Beatles en los años 60", dijo el portavoz de la Comisión de Tránsito de Toronto, Stuart Green.
Las multitudes ya habían comenzado a formarse el miércoles cuando los fanáticos hicieron fila para comprar productos, incluidas camisetas de $60, bolsas de mano de $30 y suéteres que iban desde $90 a $115.
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