La oposición plantea condiciones para aprobar presupuesto

El líder del Bloque Quebequense, Yves-François Blanchet, se reunió esta mañana con el primer ministro Carney y le presentó una serie de demandas a los liberales que quiere que se incluyan en el presupuesto, entre las que se encuentran varias que dice no son negociables.

Blanchet dijo que la reunión fue cordial, pero cargó contra los funcionarios como Champagne y Mackinon que han dicho que el Bloc y los conservadores no están colaborando ni actuando de manera responsable. Blanchet asegura que sus demandas no son nada nuevo y que el gobierno las conocía muy bien.

Por su parte el líder conservador, Pierre Poilievre, habló con la prensa antes de su reunión con Carney, asegurando que va con espíritu colaborativo, siempre y cuando el primer ministro acepte sus sugerencias.

Poilievre había enviado una carta abierta a Carney el lunes, en la que destacaba varias exigencias, entre ellas la de mantener el déficit federal en 42 000 millones de dólares, como estaba en la última actualización fiscal del gobierno de Trudeau, aunque ya se sabe que el déficit rondará los 70 mil millones, porque así lo dijo el responsable de presupuesto de la Cámara.

Con lo de los impuestos soterrados a la comida se refiere al impuesto al carbono industrial y el impuesto al empaquetado de alimentos.

En el caso del NDP, su líder interino Don Davies, afirmó ayer en un comunicado que es tarea de Carney «elaborar un presupuesto que pueda garantizar la mayoría de los votos».

«Si el líder del Gobierno en la Cámara está preocupado por el apoyo a su presupuesto de otoño, entonces es su responsabilidad ponerse en contacto con los partidos de la oposición y trabajar con ellos para conseguir su apoyo», escribió, añadiendo que no cree que los canadienses quieran otra elección tan pronto, y que los Nuevos Demócratas están dispuestos a «hacer que el Parlamento trabaje para los canadienses».

«Pero cualquier elección será decisión del Sr. Carney», escribió Davies.

Carney tiene previsto asistir esta semana a las cumbres económicas que se celebrarán en Asia. Como estará fuera del país es estos días clave antes de la presentación del presupuesto el primer ministro quiere dejar todo amarrado y hablarle hoy al país sobre la importancia de este plan fiscal.