El ministro de Inmigración, Marc Miller, amigo personal del primer ministro Justin Trudeau, dijo que la sorprendente derrota de los liberales en las elecciones parciales de Toronto-St. Paul's debería provocar un examen de conciencia en el partido, pero mantiene que Trudeau es el mejor situado para enfrentarse a los conservadores en las próximas elecciones.
Algunos encuestadores y analistas políticos han afirman que la victoria conservadora de ayer en un bastión liberal de larga data es una señal de que Trudeau y su partido se dirigen a una derrota casi segura en las elecciones generales del año que viene, pero Miller no lo considera así, y esto es lo que piensa sobre el futuro de Trudeau y sobre la derrota en las elecciones parciales de Toronto:
Mi consejo como amigo cercano no lo daría públicamente, eso seguro. Pero mi consejo como ministro y colega profesional es, sin duda, que se quede. Esta es un pérdida, no lo vamos a minimizar. Creo que muchos de nosotros tenemos que dar un paso atrás, sacudirnos y volver a subirnos al caballo, volver a la carga y luchar por los canadienses. Obviamente hay un período de introspección después de cualquier victoria o derrota y es un proceso importante que hay que recorrer, pero mientras más rápido podamos sacudirnos para seguir luchando por los canadienses mejor. El primer ministro es la persona que está en mejor posición para llevar la pelea contra Pierre Poilievre.
Miller dijo que la frustración de los votantes con el gobierno es natural después de casi nueve años en el cargo y con razón o sin ella, Trudeau y los liberales son culpados de todos los males del país.
Para recuperar la confianza de los canadienses, Miller dijo que el gobierno tiene que redoblar sus esfuerzos para hacer frente a la crisis de asequibilidad que ha hecho subir el precio de casi todo y frustrado las esperanzas de los votantes más jóvenes de ser propietarios de una vivienda.
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