La alcaldesa de Toronto, Olivia Chow, se refirió a la demanda que sometió ayer en los tribunales la empresa Uber en contra de la decisión del Consejo de la Ciudad de Toronto de no conceder nuevas licencias a empresas de transporte privado compartido hasta finales de 2024, cuando se complete un informe de regulación para el sector.
Uber asegura que la decisión es ilegal, que afecta irreparablemente a su negocio y a las personas que dependen del servicio.
Hoy la alcaldesa reaccionó diciendo que el equipo legal del ayuntamiento está trabajando en una respuesta y reiteró por qué se tomó la decisión:
Uber está pidiendo que en la próxima reunión del consejo de la ciudad se suspenda o se revoque la medida mientras el caso es conocido en los tribunales. La alcaldesa prefirió no opinar sobre cómo deberían votar los consejales en este asunto.
