El jueves por la noche, la Universidad de Toronto comunicó a los manifestantes que exigían la "desinversión" de la institución en Israel que no desalojaría inmediatamente su campamento si el ambiente seguía siendo "pacífico".
La universidad había dado de plazo hasta las 10 de la noche para que se marcharan los manifestantes, que habían sorteado las vallas y levantado más de 50 tiendas de campaña en King's College Circle a primera hora de la mañana, uniéndose así a los manifestantes de otros campus universitarios de otras ciudades canadienses y de Estados Unidos.
Sin embargo, poco antes de la hora límite, la universidad cedió.
"Nuestra propiedad es privada. No tienen nuestro permiso para estar aquí después de las 10 de la noche", dijo en un comunicado. "Sin embargo, si sus actividades siguen siendo pacíficas, no tenemos intención de expulsarles del campus esta noche".
La universidad añadió que seguía preocupada por la seguridad. De hecho, "van en aumento".
"Nos preocupa que muchas de las personas presentes puedan no ser estudiantes de la U de T u otros miembros de la comunidad de la U de T", dijo, advirtiendo a los manifestantes que la policía y la seguridad estarían vigilando.