Las compañías de rastreo de ubicación fueron criticadas por defensores de la privacidad, pero ahora los funcionarios las están usando para monitorear a las poblaciones a medida que la economía se reabre.
Muchas de las empresas de rastreo de ubicación, corredores de datos y otros intermediarios parte de la industria de la tecnología publicitaria, han sido objeto de críticas cada vez mayores por construir lo que los críticos llaman una economía de vigilancia. Los datos para dirigir anuncios a individuos, incluida la información de ubicación, también pueden terminar en manos de las agencias policiales o grupos políticos , a menudo con divulgación limitada a los usuarios. Las leyes de privacidad están surgiendo en estados como California, junto con los llamados a una legislación federal de privacidad como la de la Unión Europea. Pero algunas autoridades de salud pública están dejando de lado esas preocupaciones para combatir una pandemia sin precedentes. Los funcionarios están desesperados por todo tipo de datos para identificar a las personas potencialmente infectadas con el virus y comprender cómo se comportan para predecir posibles puntos críticos, ya sea que esas personas se den cuenta o no.
Eso está dando a las compañías de recolección de datos la oportunidad de revivir su imagen pública maltratada.
"Cuando comparte sus datos de ubicación, los comparte para ser potencialmente parte de una solución general más grande que podría salvar la vida de alguien", dijo Anton, de X-Mode, que dice que recopila información de ubicación de aproximadamente 30 millones de dispositivos al mes en los Estados Unidos "Creo que habrá una amplia franja de la población que dará su consentimiento para eso".
El Wall Street Journal identificó a docenas de gobiernos y agencias locales que están empleando o considerando usar datos de compañías que comercializan información de seguimiento, particularmente a medida que las empresas vuelven a abrir.
Un claro ejemplo es Tectonix, compañía que publicó en Twitter gráficos con datos alarmantes. Muestra su tablero de instrumentos acercándose a una nube de puntos naranjas que abarrotan una playa en Fort Lauderdale, Florida, durante las vacaciones de primavera. La publicación luego muestra los resultados de lo que llama una "consulta de araña" para mostrar cómo los dispositivos en esa playa luego viajaron por todo el país, con sus propietarios potencialmente propagando el nuevo coronavirus. Los gráficos se volvieron virales en Twitter.
Por otro lado, Alan Knitowski, CEO de Phunware, dijo en entrevistas que la compañía ganó un acuerdo para construir una aplicación de "ciudad inteligente" para Pasadena, Texas, un suburbio de Houston, con el objetivo de ayudar a la ciudad a salir del encierro del coronavirus. La aplicación recopilará las ubicaciones de los residentes inicialmente para permitir que la ciudad envíe alertas y recomendaciones localizadas sobre nuevos brotes, dijeron ejecutivos de Phunware. La ciudad dijo que también planea seguir usando la aplicación para otras emergencias.
"Cuando tiene una pandemia global, la privacidad destruirá sus intentos de resolver el problema", dice Knitowski.