El presidente de Estados Unidos Joe Biden declaró el viernes al condado Broward en Florida zona de desastre, dos semanas después que las lluvias récord dejaran inundadas partes de Fort Lauderdale y sus suburbios.
A principios de esta semana, el gobernador Ron DeSantis había solicitado la declaración, bajo la cual los residentes de Broward que sufrieron daños en sus hogares y otras propiedades son elegibles para una amplia variedad de préstamos federales y otro tipo de ayuda. Los gobiernos municipales y las organizaciones sin fines de lucro también son elegibles.
Más de 60 centímetros (dos pies) de lluvia cayeron en algunas partes del condado el 12 de abril. El diluvio de uno en 1.000 años dejó algunos vecindarios hasta 90 centímetros (tres pies) bajo el agua. Alrededor de 1.000 viviendas sufrieron graves daños, según las autoridades estatales.
La inundación también causó el cierre del aeropuerto durante casi dos días. El abastecimiento de gasolina al puerto también se redujo, lo que provocó largas filas en las gasolinerías.
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