Según la Alianza de Servidores Públicos, el acuerdo al que llegó el sindicato de empleados públicos federales y el gobierno ofrece "nuevas protecciones significativas en torno al trabajo a distancia", que era uno de los principales puntos de fricción en el conflicto laboral.
En virtud de ese acuerdo provisional, los directivos deberán evaluar las solicitudes de trabajo a distancia caso por caso – y no de manera colectiva - y responder a ellas por escrito.
Esto podría sentar un precedente e inspirar a otros sindicatos que están negociando sus propios acuerdos a pedir disposiciones similares.
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El PSAC había estado presionando para que hubiera más transparencia en torno a las políticas de trabajo a distancia, con la posibilidad de negociar el trabajo a distancia por escrito en su convenio colectivo.
Aunque aún no se han dado a conocer todos los detalles del acuerdo provisional, el lenguaje relativo al trabajo a distancia no forma parte del convenio colectivo, sino que figura en una carta de intenciones aparte.
Esto significa que el sindicato no podrá presentar ninguna queja.
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Según consta en una carta de intenciones, al margen del convenio colectivo, se hará una revisión conjunta para actualizar las directrices sobre teletrabajo que se acordaron durante la pandemia COVID-19.
Sin embargo, aún queda mucho por definir y cómo será implementado.